Las innumerables autorizaciones unilaterales que ha aprobado el gobierno delegacional para la construcción de edificios, amenazan el bienestar de la comunidad y afectan el medio ambiente.
Es un problema de agua, de seguridad, de provisión de servicios, de espacios de estacionamiento y de calidad de vida el otorgamiento indiscriminado de permisos construcción.
Ese será el seguimiento inagotable que haré de la próxima administración delegacional. Me comprometo a que vigilaré que cada nueva construcción de nuestra demarcación cumpla con todos y cada uno de los requisitos que prevé la ley.
Como me lo exige la ley, participaré, conjuntamente con las autoridades competentes, en el establecimiento, modificación y reordenación Distrito Federal.
Ninguna construcción más para enriquecer a las autoridades locales. Por ti.
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